Neoalgae acaba de lanzar al mercado el primer aceite de oliva virgen extra con plancton certificado como ecológico del mercado. Su historia viene de muy atrás.

Antes de este aceite, convertir a las microalgas en un elemento habitual de las dietas se convirtió para Neoalgae en un objetivo desde el primer momento. Así veía la luz Vesana, primera de las marcas surgidas, como cremas de verduras con superalimentos. En particular, crema de verduras con Spirulina y vichyssoise con Chlorella eran las encargadas de llevar las algas al gran consumo. Más tarde se sacaba al mercado la primera crema que combinaba macroalgas y microalgas, que destacaba por su baja cantidad de grasas, por debajo de 1 gramo por cada 100 ml de producto: Crema de calabacín, spirulina y wakame.

Las microalgas de uso habitual y cotidiano en Asia, en Europa se extiende a ritmo constante. Sobre todo por la Spirulina, la más conocida, cuyo nombre ya no resulta extraño. Junto con la Chlorella y la Tetraselmis forman el trío de algas cuyo uso alimentario se permite en Europa.

Precisamente es la Tetraselmis a la que habitualmente se la conoce como Plancton. Rica en Omega3, su cultivo se debe realizar en condiciones muy controladas. En Neoalgae se mima mucho.

Las últimas tendencias en cocina invitan al consumo de las microalgas en cocina. Chefs como Ángel León, más conocido como “el Chef del Mar”, del restaurante A poniente, es el baluarte de esta tendencia.

El desarrollo del aceite no resultó sencillo. Primero, porque es el primer producto de este tipo que se certifica como ecológico, ya que las microalgas no es un campo muy explorado dentro de la agricultura ecológica.

Una vez superado el primer obstáculo, tocaba desarrollar sabor: Tipo de oliva, relación entre aceite y plancton… Para ello, contamos con la colaboración de chefs de alto nivel que nos asesoraban y nos indicaban. Destaca Lara Rodríguez, chef del Restaurante Kraken de Gijón, amiga de Neoalgae con la que se están desarrollando proyectos en común.

El resultado es un aceite de oliva virgen extra con un más del 50% de variedad arbequina, dividiéndose el resto entre hojiblanca y picual. El plancton le confiere un intenso sabor a mar. Su uso se recomienda para aliñar todo tipo de platos, destacando en ensaladas o arroces. Pero quizás, simplemente mojando pan, puede resultar exquisito.